El comportamiento de un niño puede ser inestable y puede tener problemas tanto de coordinación como en su desarrollo físico. Pueden ser vulnerables a las infecciones, dolores de cabeza, de crecimiento, de estómago, etc También puede sufrir la postura del niño, con la cabeza inclinada hacia un lado y un hombro más alto que el otro.
Mi trabajo es conseguir un desarrollo saludable del niño, corrigiendo esas pequeños desajustes para que en un futuro todo fluya correctamente.